domingo, 15 de agosto de 2010

El dinero, el fútbol y los contratos

Recientemente hemos podido ver dos claros ejemplos de lo que ya es el fútbol en la actualidad: un negocio. El dinero cada día que pasa tiene más influencia en el mundo del fútbol, y es un problema que no todos los clubes ni organismos han aprendido a convertir en un beneficio.

Primero, el F.C.Barcelona jugaba un amistoso en Corea del Sur contra un combinado de los mejores jugadores de la K-League. Messi acababa de llegar a la pretemporada, y tan sólo había participado en un entrenamiento. Guardiola insistió al principio que no iba a jugar, pero pronto los organizadores del partido pusieron sus cartas encima de la mesa: o Messi jugaba o el club no cobraría los 2 millones de euros del contrato. Al final, Pep tuvo que dar su brazo a torcer y sacar a Messi durante 17 minutos. Pudo haberle salido mal la partida, pero el crack argentino anotó dos golazos y no sufrió ninguna lesión. Tuvieron tanta suerte que puede que fuera hasta beneficioso para la pretemporada de Leo jugar ya un partido con ritmo y coger confianza. 

El segundo ejemplo también está relacionado en parte con el club de Barcelona. La Federación Española de Futbol había concertado un amistoso en México tan sólo 1 mes después de la consecución del Mundial. El contrato de nuevo establecía unas condiciones fastidiosas: tenían que ir convocados el 60% de los campeones del mundo. Del Bosque no tenía elección: tuvo que convocar a los 7 internacionales españoles del Barça. Esta vez sí que el club catalán pagó las consecuencias de los contratos y la importancia del dinero en el fútbol, ya que Guardiola tuvo que sacar al terreno de juego a jóvenes de la cantera con poca experiencia, y al final le salió caro la decisión de la RFEF.

Estos son dos ejemplos claros de que en el fútbol cada vez tiene más presencia lo económico, y es una baza que hay que saber manejar. De momento, la RFEF no ha sabido cargar con este peso, pero esperemos que aprendan la lección.